viernes, 14 de agosto de 2020

A veces creo que fue brujería lo que me pasó con vos, el nivel en qué te amo, o la forma en la que me llegué a enamorar, tan distinto a todo lo nuestro, tan pasional e intenso desde el primer momento que por más que intenté ponerle un freno un año y uno meses después sigo igual de hasta las manos. 

Es un deseo constante, o ganas de abrazarte y que me digas que va a estar todo bien, o despertarme un día abrir los ojos tenerte al lado y que todo haya sido un mal sueño. 

Que la próxima vez que llore sea de felicidad y no porque te extrañe como ahora; cómo explicarle a los demás, cómo hacerte entender a vos que sos una parte de mi, y que así no me siento yo.