Desde la semana pasada no te dejo de pensar,

Bueno, siempre lo hago en realidad, pero estos días con mayor intensidad. 

Pensé en escribirte unas 100 veces,

Y te extrañé unas 100 más.

Es la primera vez en más de un año que pasamos tanto tiempo sin hablarnos, y es raro que no estés. 

No hago mucho, pero siento que tengo miles de cosas para contarte. 

Canciones que dedicarte, 

E infinitos besos para darte. 

No hay un día que piense en vos y no llore, a veces de tristeza, otras de felicidad al recordar lo lindo que tuvimos.

Y cada vez entiendo menos que me hiciste, si los planes con vos eran sólo sexuales, no quería otro vínculo; tampoco llego a percibir en qué momento me metí tan a fondo con vos, cuándo llegué a enamorarme tanto? 

Pero, no me arrepiento sabes? Ni siquiera ahora aunque este sufriendo, me encanta amarte, nací para esto, y para vivir el amor con esta intensidad.

Cada tanto me enojo, pero conmigo, por no poder dejar de sentir todo esto que siento por vos, porque la verdad que un poco cansa estar tan mal o extrañarte tanto, pero sobretodo por ser tan vulnerable a una persona o que mi estado de ánimo dependa únicamente de vos. 

Yo, siempre tan independiente pero también tan dependiente de tu amor.

Estoy sin ganas de nada si te soy sincera, y aunque todos me digan que cada día voy a estar un poco mejor siento que es realidad todo lo contrario, una parte de mi se apagó, y sé - porque me conozco- que no se va a volver a encender, la vida no es la misma sin mi rayito.