Dormía triste cada noche,
La cama no estaba vacía pero así se sentía,
Estaba al lado pero parecía a kilómetros,
Se preguntaba si quería eso,
Si le hacía bien,
Si lo bueno opacaba lo malo, o si era al revés.
Buscó mucho tiempo respuestas a preguntas que nunca le hizo, ni le hará.
El desamor no aparece de un día para el otro,
Había señales claras, en pequeñas cosas, en lo diario, lo cotidiano
Vio lo que quiso ver,
El corazón le puso una venda en los ojos.
Ahora habla con fantasmas que tampoco la saben escuchar,
Aunque siente que está en paz.
Desearía un encuentro más, una cerveza en un bar, para darle a su amor un verdadero final.